Estosupone no sólo la exclusión de todo contacto social, sino también, sobre todo, la exclusión de todasaquellas prácticas caras a nuestra manía didascálica y pedantesca.
El resultado de la educación escolástica es la formación de hombres inútiles, de letrados que sólo saben enfrascarse en disputas verbales y vanas o en exhibiciones pedantescas.