Los cuatro sacos de los extremos se deben colocar cruzados en dos entibas distintas hasta la altura de quinto saco, donde se debe disminuir un saco por cada cinco.
Hasta nosotros, los ciudadanos de esta nación viciada, nos convertimos en intolerantes cuando nos quedamos de brazos cruzados ante este tipo de faltas.
Aquí hay las típicas consideraciones de pelillos a la mar, que si los demás somos cruzados éticos y bla-bla-bla: recordemos que el autor es profesor de fisiología del deporte.